lunes, 12 de diciembre de 2011

Sueños

La estancia en penumbras, con una halo de luz mortecina que permite ver los movimientos que se avecinan tras el telón.
Algunas certezas -pocas- y un mar de dudas que incitan a descubrir nuevos mundos.
Tallando en piedra nuestras esperanzas, vamos recorriendo el camino.
Un sueño que te despierta del letargo. 
Un sueño.