miércoles, 7 de noviembre de 2012

Atentado

Cuando sucede un atentado, el instante que sigue es de parálisis. Se produce un silencio absoluto en el que las víctimas contienen la respiración y cierran sus ojos con la esperanza de que al abrirlos "eso" que consideraban absolutamente imposible, no sea verdad.
Así lo afirman los sobrevivientes del atentado de Atocha, las Torres Gemelas, o cualquier atentado alrededor del mundo.

Luego de ese instante de estupor, desconcierto e inmovilidad, sobreviene el vértigo. Una locura de actividad frenética en la cual aparecen miles de héroes anónimos que arriesgan su integridad física en pos de rescatar a desconocidos.
Valientes que atraviesan las llamas del infierno, entran en edificios tambaleantes y escarban kilos de escombros con una sola cosa en mente: salvar al otro. 
Ese frenesí de heroísmo cederá con el paso de las horas y sólo cuando el cansancio haga mella.
Luego seguirá una tarea de rescate más pormenorizada y planificada, fruto del accionar de especialistas, que harán esfuerzos desmedidos por rescatar las vidas humanas que se puedan.
Más tarde llegarán los trabajos finales de remoción de escombros, y el rescate de los cuerpos sin vida de las víctimas fatales.

Luego de todo esto, viene el camino más largo, el más necesario para que la tragedia no se repita: la investigación y la justicia.

Nuestro país sufrió un atentado. Según la RAE un atentado es: 4. m. Agresión contra la vida o la integridad física o moral de alguien.
Las personas que viajaban en el tren Sarmiento en el cual murieron 51 argentinos,en febrero de 2012, sufrieron un atentado.

Nuestro país TODO lo sufrió.

Y sin embargo pese a las muertes, pese a los heridos, pese a las vidas arruinadas, las ilusiones perdidas, los sueños mutilados, no hay ni investigación ni justicia.

Cualquier sociedad sana necesita explicarse las razones, acá las escondemos.
Cualquier país decente exige transparencia, acá exculpamos a los culpables.

Qué nos pasa como sociedad que 51 muertos no son suficientes? 

Pobre de nosotros si no somos capaces de exigir y buscar justicia para que NUNCA MÁS vuelva a suceder.

Saludos y los espero el #8N

martes, 23 de octubre de 2012

#8N - Te esperamos

Vení con amigos.
Vení en familia.
Vení solo.
Vení con tus compañeros de trabajo.

Vení como quieras!

Los ciudadanos vamos a peticionar ante nuestras autoridades. Lo haremos sin banderías políticas, sin colectivos contratados que nos movilicen, sin pagos ni prebendas.

Pedimos como podemos, de a pie, con pancartas, carteles y cánticos.

Pedimos en paz. 

Estamos cansados y por eso PEDIMOS.

Pedimos:
  • Justicia x Once
  • Libertad SIN aprietes
  • Que dejen de robar en nombre de "El Modelo"
  • Respeto a nuestras libertades individuales
  • Seguridad 
  • Justicia independiente
  • Igualdad ante la ley
  • Democracia auténtica
  • Independencia de poderes
  • Educación SIN adoctrinamiento


Pedimos MUCHAS cosas más. 

Vení a pedir con nosotros, si pedimos TODOS JUNTOS, nos van a tener que escuchar.


viernes, 6 de julio de 2012

Incoherencias

Explicame la coherencia de un país que se jacta de su ley de identidad y el mayor pico de rating de los últimos tiempos lo hizo un señor con peluca platinada y tacos altos.


 Un país lleno de personas con la cabeza lo suficientemente abierta para permitir que el baño de mujeres de una universidad desaparezca para darle paso a un baño unisex, en el que las damas ya no podremos asomarnos del cubículo con cara de pánico y preguntando: alguna tiene un Siempre Libre?
Un país tan desencajado, que discursea acerca de la identidad de género y le da un DNI de perro a un oso polar, pero que se regodea con un programa donde la mujer no tiene contenido, ya casi ni siquiera continente. 

Sería bueno que asumamos, como colectivo, que somos bastante menos abiertos de lo que pretendemos ser, tanto como para reírnos con Tinelli disfrazado de mujer o de Zulma Lobato y sus miserias.


Por cierto, me enteré del show y sus repercusiones por las redes sociales y las noticias.
Saludos!

domingo, 11 de marzo de 2012

Mentiroso, mentiroso.

Los niños son una fuente de información enorme. 
Esto se debe principalmente a que ellos aún no tienen desarrollados los filtros sociales, y culturales que nosotros, los adultos, utilizamos en cada una de nuestras comunicaciones.
Quién no tiene anécdotas de las "metidas de pata" de sobrinos, hijos o de uno mismo cuando era un purrete.

Si nos detenemos a observar a un niño en su primera infancia, veremos que cuando miente o dice algo que sabe "incorrecto", se tapa la cara o la boca. Es un gesto típico en la infancia, que al crecer vamos disimulando. Y es que nuestra educación nos encorseta y nos prepara para mentir sin ser descubiertos.
La vida adulta necesita, entre muchas otras habilidades comunicacionales, enmascarar estos impulsos inconscientes. 
Así es como cada persona enmascara esa mano en la boca o en la cara de diferentes modos.
Algunas de esas máscaras, las más frecuentes, son: bajar levemente la cabeza, parpadear repetidamente o parpadear de manera más pesada o negar con la cabeza lo que se afirma en palabras.

La mejor forma de apreciar estos gestos es ver sin escuchar. 
En este primer vídeo los invito a ver, sin audio, a nuestro amadísimo Boudou.
Busquen los momentos de inclinaciones de cabeza (vergüenza), parpadeos pesados, se distinguen porque pareciera que los parpados se le quedan pegados un segundo más de lo norma (al igual que el niño, se esconde tras los párpados porque sabe que lo que dice es "incorrecto"). Una vez que hayan encontrado esos momentos en el vídeo, pongan el audio y: VOILÁ!!!

Para ayudarlos les doy unas pistas: parece que Boudou NO puede decir que los de Boldt "intentaron hablar", que "hubo intentos" o que "lo hice", sin bajar la cabeza y parpadear pesado.